El aplauso de familiares y amigos acompañó a los nuevos 105 graduados que protagonizaron la XXIII Ceremonia de Colación de Formación Continua celebrada, este jueves 22, en la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM).

El acto fue presidido por el director de la Escuela de Formación Continua, Eduardo Rolleri, junto a las autoridades de los departamentos académicos de la Universidad, quienes tomaron jura y entregaron los respectivos títulos a egresados de distintas maestrías, especializaciones y doctorados.

Al momento de tomar la palabra, Rolleri expresó que "una primera tarea de la Universidad consiste en convertir las cuestiones sociales en problemas científicos y de reflexión". En ese sentido, hizo un paralelo entre la autonomía universitaria y la autonomía individual que llamó a ejercer por parte de los graduados.

“No se debe correr solo detrás de las demandas puntuales de la sociedad, lo que sería una visión oportunista y condicionada de la universidad”, advirtió. Y, por el contrario, propuso "mantener un compromiso intelectual, cívico y profesional con la sociedad” con una “particular misión de servicio”.

De esa manera, convocó a los egresados a asumir la iniciativa, a potenciar la autonomía, a comprometerse con abrir caminos y a trabajar duro con visiones claras por los objetivos: “Queremos que ustedes tomen el compromiso de incorporarse a la vanguardia, enarbolando la bandera de la excelencia para su propia satisfacción personal pero, sobre todo, para el bien de nuestras generaciones”.

El egresado de la Licenciatura en Comercio Internacional, Emiliano Daniel Bilski, fue el elegido para dar un discurso dirigido a los presentes en representación de sus compañeros.

“Con este acto, llegamos al punto de cierre de uno de los caminos más importantes que hemos recorrido. Fue mucho más que años de estudio y rendir exámenes”, enfatizó en relación a las vivencias compartidas con compañeros y docentes. A lo que agregó: “El título obtenido no es lo más importante, sino lo que se pueda representar en nuestro futuro profesional”, manifestó el flamante egresado.

Además, aseguró que representa “un verdadero orgullo” haberse graduado en la UNLaM, universidad que le deja “un legado y una misión para los años venideros: la enseñanza”. “La Universidad nos transmitió la integridad y los valores que deben formar de aquí en adelante”, concluyó.